El sancocho de gallina criolla es uno de los platos más entrañables y tradicionales de la mesa nariñense, preparado con el inconfundible sabor de las gallinas de patio criadas en los hogares campesinos. Su preparación reúne la esencia de la cocina andina: maíz tierno, papas, yuca, plátano verde y hierbas aromáticas, cocidos lentamente hasta lograr un caldo espeso, fragante y lleno de carácter.
Más que un alimento, este sancocho es símbolo de reunión familiar y hospitalidad. Se disfruta especialmente en los almuerzos dominicales, en celebraciones locales y encuentros entre amigos, siempre acompañado de ají casero y limón fresco, que realzan el sabor único de la carne criolla y equilibran la dulzura de los vegetales.
Cada cucharada de este plato representa la identidad campesina de Nariño, donde la cocina se comparte con cariño y se convierte en puente entre generaciones. Degustar un sancocho de gallina criolla en tierras nariñenses es vivir la autenticidad de su gastronomía, en un caldo que reconforta tanto el cuerpo como el alma.