El Templo Nuestra Señora del Rosario de Iles es un importante centro de devoción mariana en el sur del departamento de Nariño, Colombia. Su advocación a la Virgen del Rosario ha sido el eje de la vida religiosa del pueblo desde tiempos coloniales, atrayendo a fieles de la región y del vecino país de Ecuador. Cada primer domingo de octubre, se celebra su festividad con un quincenario en el que participan comunidades locales y visitantes, quienes expresan su fe a través de ofrendas, agradecimientos y peregrinaciones.
Historia
La tradición cuenta que la imagen de Nuestra Señora del Rosario llegó a Iles desde Centroamérica, en su tránsito hacia Ecuador, bajo el cuidado de la comunidad de los dominicos. Sin embargo, fue el gobernador indígena Cuacialpud quien la recibió y la acogió en el pueblo, estableciendo así un profundo vínculo espiritual entre la Virgen y los habitantes de Iles. Se cree que los sacerdotes Doctrineros Dominicos fueron quienes fortalecieron la devoción y consolidaron la vida religiosa de la comunidad, dando origen a la veneración inmemorial de la Virgen, conocida en aquella época como «Nuestra Señora de la Luz».
Arquitectura
El templo destaca por su diseño singular y su imponente presencia. En el exterior, se asemeja a una gran fortaleza con torrecillas cónicas y decorados geométricos en su fachada. En el interior, se pueden apreciar columnas delgadas y redondas, arcos ojivales que sostienen la cubierta, y pinturas de ángeles y bordados en tonos pasteles que le confieren un ambiente colorido y acogedor. Las naves laterales cuentan con vitrales que, aunque sencillos, iluminan el espacio con una atmósfera espiritual. En la parte alta del altar mayor, el camarín de la Virgen recibe a los peregrinos que suben hasta allí para elevar sus plegarias.
Patrimonio cultural
Su festividad anual reúne a fieles de diferentes regiones, incluyendo devotos ecuatorianos, que participan en las celebraciones con fervor y gratitud. La iglesia está ubicada en el corazón del municipio, junto al parque principal, lo que la convierte en un referente arquitectónico y espiritual. Su importancia trasciende lo religioso, ya que es un símbolo de identidad y tradición para los habitantes de Iles y sus alrededores.