En las montañas del municipio de La Cruz, al norte de Nariño, emerge un manantial que combina el poder del fuego volcánico con la serenidad del agua: la Fuente Termal de Tajumbina. Nacida del complejo volcánico Doña Juana, sus aguas sulfurosas brotan a 62 °C, creando un espectáculo de vapor entre la neblina fría de los 10 a 12 °C que caracteriza la zona.
El entorno ofrece piscinas naturales y pequeñas cascadas termales rodeadas de vegetación andina, donde el visitante puede relajarse en un ambiente rústico y puro. Este destino es de acceso público y se llega fácilmente por carretera y senderos cortos que conducen hasta las pozas. No forma parte del sistema de Parques Nacionales, por lo que no requiere permisos especiales: cualquier viajero puede disfrutarlo libremente, aunque es habitual realizar un aporte simbólico o consumir productos locales para apoyar a la comunidad.
Las Termales de Tajumbina son reconocidas por sus propiedades medicinales, su energía volcánica y la belleza del paisaje que las rodea. Un lugar abierto, acogedor y auténtico, perfecto para quienes buscan descanso, bienestar y contacto directo con la naturaleza.